domingo, 26 de diciembre de 2010

BREVE REFLEXIÓN SOBRE EUROPA

Podemos, debemos hacernos muchas preguntas sobre la situación política global ante la que nos enfrentamos todos y creo que es importante subrayar “el todos” pues podría parecer que es una cuestión que afecta nada más que a una parte de la sociedad. Todos, significa, por un lado, ciudadanía: los que trabajan y los que están en el paro forzoso, hombres y mujeres, jóvenes y niños. Los profesionales, los artistas, los políticos……y por otro lado, el modelo social sobre el que hemos diseñado una nueva Europa. Unos y otros con el sistema democrático y de Derecho que construimos, mantenemos, sustentamos lo que llamamos el Estado de Bienestar, por cierto, enormemente denostado en los últimos años por aquellos que no han creído, ni creen (léase opinión de Aznar sobre el mantenimiento del modelo europeo) que se puede tener mayor calidad de vida y que ésta proporciona, a su vez, riqueza generalizada, incluso para esos que prefieren que la desesperación se instale en las vidas de la mayoría.

Los mercados no descansan, siempre presentes para crear las crisis y para aprovecharse de ellas, para exigir la no intervención de la política como para obligar a que se intervenga y se les sanee sus cuentas y en cualquier momento, vigilantes para (como ocurre ahora) acosar a los gobiernos para que se reconvenga los acuerdos políticos alcanzados durante décadas en favor de un modelo que les de más riquezas y nos empobrezca más a todos. El dinero, la insolidaridad está detrás de todo y lo hacen aprovechándose de la debilidad en la que se encuentra nuestro Continente, divididos en veintisiete gobiernos de una mayoría claramente conservadora, que nos debilita al encontrarse frente a un ejemplar proyecto progresista, en el que no creen.

El mercado, no tiene corazón, éste lo pone la política, es decir todos, de ahí que debamos entender que es importante la sublevación de nuestras conciencias en pro y defensa de la intervención política en la economía. Los europeos más que nunca necesitan hacerse preguntas, tales como: está dispuesta a sacrificar siglos de trabajo y de esfuerzo a favor del libre pensamiento y de la instalación del humanismo en la vida de sus conciudadanos o simplemente se va a entregar a la sinrazón del egoísmo de aquellos que no están dispuesto a sacrificar absolutamente nada y a exigir y provocar que el sacrificio venga sólo de los que conforman la mayoría sociológica.

Europa no puede permitirse ni tan siquiera un momento de duda, ha de seguir avanzando y lo tiene que hacer incorporando nuevos elementos de dirección política en sus órganos de gobierno, de forma y manera que nuestro continente pueda competir en ese nuevo escenario internacional que se está configurando a pasos agigantados, ya no me refiero sólo a los Estados Unidos sino a ese nuevo mundo que empieza a ser competitivo en muchas materias y muy especialmente en la tecnológicas.

Los diferentes gobiernos que configuran la Europa actual han de liderar el cambio que demandan los ciudadanos y lo han de hacer con generosidad y valentía, huyendo de posiciones nacionales excluyentes, que lejos de dotarnos de identidad, personalidad y capacidad para decidir, nos debilitan y provocan un efecto dominó que nos sitúa a todos, proyecto incluido, en manos de desaprensivos y especuladores.

Necesitamos un gobierno único en Europa, con una política fiscal única y con poder suficiente para engrandecer aún más las diferentes señas de identidades democráticas de los diferentes países que la conforman y poder exportar un modelo que de seguir avanzando sería el único que podría conseguir que el pleno empleo fuera una realidad en el mundo global en el que vivimos. Esto es posible y necesario y estoy convencida por mucha derecha que gobierne que es imparable, en tanto que necesidad biológica es.

Necesitamos ser líderes políticos en el desarrollo económico mundial, debemos ser deterministas en cuanto al futuro y eso sólo es posible con la participación predominante de los ciudadanos, que tarde o temprano se pondrán al frente del necesario cambio, contra la reacción de los inmovilistas.

domingo, 14 de noviembre de 2010

INFORMACIÓN DESINFORMADA

Se hace necesario entender la heterogeneidad de ciudadanos que se da en las ciudades del siglo XXI, para comprender las dificultades existentes de los partidos políticos para poder llegar con un discurso inteligible y diferenciador a cada uno de los habitantes de una población, de una región determinada o de todo un país.

Sin duda alguna, en plena Revolución Industrial, cuando los campos se despoblaron para conformar una gran masa humana en los núcleos urbanos, por otro lado, pequeños, en general y sin planificación urbanística alguna o al menos muy simples, posibilitaron que el asociacionismo proliferara, desde la puesta en común de una misma problemática, frente a un enemigo perfectamente identificado, que lejos de solucionar sus problemas los acrecentaba con medidas de tipo represivo. Ni que decir que la gran concentración de trabajadores (proletarios) en grandes empresas (la industria) a la vez que en barrios construidos y diseñados para ellos, con bajos salarios y con un ataque constante y directo sobre su dignidad, hacían que la lucha obrera fuese la única salida posible en la defensa del interés general.

La realidad de hoy es bien distinta, al menos, en este mundo en el que habitamos, llamado desarrollado. La industria existente ha incorporado nuevas, avanzadas y desarrolladas tecnologías que hacen que la fuerza de trabajo empleada, no sea ni mucho menos para considerar al trabajador, como proletario. La mano de obra es especializada, lo que no ocurría con éste, y desde luego sus condiciones laborales, si bien deben mejorar, no son ni mucho menos las que había en el siglo XIX, ni tampoco en gran parte del XX.

Las ciudades ya no concentran a ciudadanos en función del gremio al que pertenecen, de modo que, afortunadamente, ya es posible encontrar en nuestras urbanizaciones (algo más humanizadas que las de antaño) funcionarios, profesionales, mecánicos, albañiles, autónomos, etc. de clases bajas, medias y altas, conviviendo con total normalidad. Es decir, la pluralidad de status, educación y culturas, ha llegado a nuestras barriadas, conformando un ente multicultural que nos ha de hacer plantearnos formas diferentes de comunicación y de explicación para afrontar y acometer los diferentes problemas, que sin duda, también se da en este nuevo modelo de urbe.

Obviamente hay que mencionar que la información, la comunicación a través de los diferentes medios existentes, incluyendo, desde luego, ese gran canal comunicativo que es Internet, ha conformado una realidad social, política, económico, etc. que nos ha de hacer plantearnos que hay un nuevo modelo de sociedad a la que los partidos políticos de izquierdas, tendrán que llegar y a las que, creo estaremos de acuerdo, tienen grandes dificultades para hacerse oír. Sea como sea, sabemos, conocemos, que la prensa en España, es leída por un 39 % de la población, que la radio, es seguida por un 55.2 % , la televisión por un 88,7 % e Internet por el 35 % según el Estudio General de Medios, que de Abril de 2009 a Marzo de 2010, realizó la empresa AIMA entre otros medios.

A los datos ya mencionados le acompaña que son las mujeres con un 51 % las que más se preocupan por las informaciones que se les proporciona, frente a un 49 % de hombres que lo hacen. Si seguimos ahondando en el estudio, es decepcionante, que las personas comprendidas entre los 25 años y los 44, tan sólo siguen los medios un porcentaje entorno al 19 %. Dicho todo esto y sin ahondar en aquellos que tan sólo siguen los titulares sin entrar en el contenido de la información, y teniendo en cuenta la enorme repercusión de los medios audiovisuales, fundamentalmente la televisión, parece obvio que los amantes de la democracia participativa, no deberíamos conformarnos con comunicarnos tan sólo a través de ellos. Ojo, no quiero decir con esto que no sean importantes y que no haya que seguir trabajando sobre los mismos, todo lo contrario, pero se estará conmigo en que se hace necesario (si queremos profundizar en el Estado de Derecho) un mejor y más profundo análisis sobre las formas y canales comunicativos más personales y directos.

Por tanto, si estamos de acuerdo, que la ciudad ha cambiado, que las costumbres, ocios y empleos ya no son lo que eran; que las nuevas tecnologías han supuesto una revolución en la concepción que del mundo se tenía, contemplando las relaciones sociales, laborales y humanas desde parámetros diametralmente distintos a como se concebía en otros tiempos, es razonable, que la metodología de trabajo y de acción política de aquellos que creemos profundamente en que un mundo mejor es posible; cambie y lo haga articulando discursos y comportamientos que nos aboquen al intercambio de opinión, de forma directa, con aquellos que contribuyen con su esfuerzo, trabajo y solidaridad al mantenimiento del Bienestar ciudadano.

Invitar a pensar es la consecuencia de la existencia de una interlocución sincera, honesta, clara y mutua, que se produce desde el entendimiento común. Hacer y crear cultura ha sido siempre uno de los grandes valores de la izquierda.

sábado, 16 de octubre de 2010

HACIA UN NUEVO RUMBO

Una reflexión personal invita a un locuaz e interesante debate entre amigos y/o compañeros de un mismo, u otro proyecto global. Pero cabría preguntarse: ¿Se reflexiona o se hace partícipe de las reflexiones que de forma individual tenemos con otras personas o si bien así lo hacemos sirve de algo la coparticipación, tal como la podemos estar llevando hasta ahora?

La verdad sea dicha, el mundo en general no marcha nada bien. Se que esto se puede discutir, pero permítaseme poner un solo dato sobre la mesa, que podemos obtener de Organismos Internacionales y que está reflejado en los medios de comunicación mundial y es que “los ricos aumentan exponencialmente a como lo hacen los pobres”. Bien, dicho esto de esta manera, tendría que servir para que en nuestros análisis políticos y sociales, desde una óptica de progreso, estuviésemos de acuerdo en que algo falla en el Planeta Tierra.

Un segundo dato, que parece ya nadie discute, es que la representación progresista existente en los diferentes estamentos que conforman Europa o el resto de continentes, está desaparecida, o lo que es peor, abducida por un sistema de valores que en nada tienen que ver con aquellos que pretenden hacer avanzar el Estado Democrático y de Derecho y por tanto el Bienestar de los diferentes países que conforman el Globo Terráqueo y que en nuestro caso ha sido la bandera que hemos enarbolado para ejemplo de buen gobierno planetario.

Dos importantísimas cuestiones que nos tendrían que llamar, no sólo a la inquietud personal y humana, sino a nuestra movilización intelectual en busca de una solución que ponga freno a los despropósitos del individualismo y el egoísmo de aquellos que son los responsables de esta terrible crisis económica que nos asola y que tienen la desvergüenza de afirmar que la solución pasa por más trabajo y menos salario, sin autocrítica y sin mostrar ningún ápice de sacrificio por su parte, sino todo lo contrario, reteniendo sus grandes fortunas y evitando el movimiento del dinero, hasta que, probablemente se liberen de esos activos (tierra y ladrillos fundamentalmente) que les estorba para mejores negocios.

Javier Solana, Felipe González, en los últimos meses han manifestado muy claramente que tenemos un gran problema de Liderazgo mundial y muy fundamentalmente en Europa, lo que está propiciando el avance de los gobiernos de derechas y lo que es mucho peor, de extrema derecha.

Las libertades, los derechos ciudadanos, están siendo limitados en aras de acabar con un peligro supuestamente mayor, venido del exterior….cuando no del interior y me explico: los representantes de la involución dirigen nuestra opinión y movilización contra los ciudadanos pobres o extremadamente pobres de otros países que se instalan en el nuestro a fin de encontrar una vida mejor, pero también, se utiliza la confrontación con los de la misma nacionalidad, ejemplo de primer orden es España, dónde el P.P. presenta, a menudo como problema de los ciudadanos: los catalanes, los vascos, los andaluces, los extremeños, los castellanos manchegos, etc. A todos se les busca su San Benito, pero obsérvese, que esa desviación de la mirada conservadora va siempre dirigida hacia los mismos, o al menos, a quién le afecta, es a las capas de la sociedad más modesta. Mientras tantos los causantes de nuestras desgracias, aquellos incompetentes y malos gestores del dinero mundial, pasan de rosita sin que nadie fije en ellos la mirada. El problema es, son, somos, aquellos que mayoritariamente conformamos una sociedad y que nos encuadramos en la denominación financiera, de no ricos.

Es curioso, porque nos pasamos grandes horas buscando determinar qué es clase trabajadora y hasta dónde ésta llega a ser de status medio, todo ello en una utilización torticera de esa noble ciencia, la Sociología. Tal es el ridículo intelectual, que empezamos a considerar que los intereses de ellos y de aquellos que acaudalan las grandes fortunas, son los mismos.

Siempre he pensado que una sociedad marcha con dirigentes y partidos capaces. No he creído nunca en que los movimientos espontáneos lleguen a buen puerto sin la ayuda de una mínima organización política y ciertamente los tiempos cambian, los momentos políticos cambian y las personas asumen su momento histórico en unas condiciones diferentes a cómo lo fueron en el pasado. Es verdad que muchos de los problemas persisten en el tiempo y que a ellos tenemos que seguir empleándonos, pues el fondo de la cuestión, el de la desigualdad, continúa, pues es la esencia del sistema capitalista.

Creo que empieza a ser necesario una revisión de los postulados progresistas, adaptados al mundo en el que vivimos y a las circunstancias políticas y sociales que se están dado y estoy convencida de que esa revisión pasa por la Generosidad de los librepensadores que estén dispuestos a liderar un nuevo rumbo mundial y desde luego ha de continuar siendo Europa, el continente que ha de servir de modelo, de ejemplo movilizador y sobre todo de exportador de los valores democráticos al resto del Planeta.

La Internacional Socialista tiene que empezar a dar muestras a la ciudadanía, de que hay otra forma de hacer política y que ésta, desde luego, pasa por los valores de la Libertad, la tolerancia, la igualdad, la justicia social, la solidaridad y la mayor participación democrática de los ciudadanos en las decisiones que les preocupan, importan y les afectan.

La izquierda mundial ha de plantearse un nuevo modelo de organización política y social que permita no sólo, que los avances de la Revolución Tecnológica, llegue a todos los rincones, sino que además permita que la palabra entre representantes y representados pueda ser más cercana, directa, transparente y honesta. No me refiero al mayor acercamiento parlamentario, sino al de las organizaciones de bases, que han de servir para, llevar la palabra y la explicaciones de lo que se hace, a todos los ciudadanos, esperando de ellos respuestas que corrijan los desequilibrios que se producen en la sociedad moderna actual.

En definitiva el desarrollo y avance de los postulados democráticos que han de ser llevados hasta el tuétano de nuestras decisiones, han de ser ejemplo ante las gentes que nos ven y nos conocen pues ellos han debido ser copartícipes primordiales de las mismas.

El siglo XXI ha de ser ese espacio-tiempo para los cambios profundos en las convicciones democráticas y en la concepción que tenemos de la propia democracia, de forma y manera que nos sirva para el establecimiento de los grandes avances del futuro, rechazando radicalmente que la solución pase por su limitación y no por el acercamiento institucional, incluidos los partidos políticos, sindicatos, asociaciones, etc. al común de las personas, permitiéndoles que toda decisión salga con el refrendo, la comprensión o simplemente el entendimiento de aquellos a quienes va destinadas.

Más participación, más consenso, es también más Estado.

lunes, 20 de septiembre de 2010

LABORDETA

Al compañero, al amigo, al cercano y entrañable profesor, a uno de los cantautores favoritos de mi juventud adolescente, al que mandó a la mierda a esa derechona que impide hablar a los demócratas con sus broncas permanentes en los hemiciclos de la palabra, a los que llamó gilipollas por afirmar hipócritamente ser valuarte de esta democracia nuestra a la que impiden permanentemente su desarrollo constitucional y la memoria.

Al aventurero con macuto a la espalda y bastón, que nos enseñó cada rincón de España, mostrándonos las múltiples zonas, sus mejores rincones, lo mejor de sus gentes, de sus costumbres de la forma de afrontar la vida. Dándonos razón a la existencia de este País desde las diferencias existentes entre los hermosos territorios que la conforman y que legitiman que la pluralidad y ese ser diferente de cada uno, nos une y nos procura un rol identitario incuestionable y nos aleja del uniformismo reaccionario.

Al hombre de izquierdas que nunca ocultó, ni se avergonzó de su puño en alto….. a cada ritmo, a cada sonido bronco de su voz, a cada expresión, a cada palabra, indicándonos siempre, recordándonos eternamente que ese símbolo significa trabajadores del mundo unidos. A ese hombre que gustaba de hablar con las gentes, de relacionarse con ella para así seguir aprendiendo, seguir conociendo de sus necesidades y para poder llevar a su música, a sus versos, la reivindicación de los más débiles, de aquellos que no tienen la palabra porque los ricos se las desmerece o se las quita.

Al político que no claudicó, que no se derrumbó nunca, que entendió que esa palabra, proveniente del griego TTOÀIÇ (polis=ciudad) fue dejada dicha para que comprendiéramos que todos los que se dedican a la noble y voluntaria política, lo hacen por y para los ciudadanos y lo deben hacer siempre alejados de los postulados egoístas e individualistas de aquellos elementos conservadores que sólo buscan su propio beneficio.

Al cantautor que cantó a la Libertad, convirtiendo una hermosa canción en un verdadero himno, digno de ser considerado para esa, su tierra, Aragón y que dedicó una parte muy importante de su vida a la lírica demostrativa de la belleza de las palabras por boca de un aragonés que muestra los sentimientos de aquellos a los que se le niega la versificación del dolor y la pasión de sus circunstancias.

Al niño libertario que siempre fue y cuya atención la fijó en la hermosura de su entorno rural, a los sentimientos de paz y de prosperidad de una humanidad necesitada de ella, y cuya personalidad quedó prendada en la defensa de lo bueno y lo justo, de lo noble y lo correcto, del ejemplo con su ejemplo de comportamiento social, conforme a los ideales de Libertad que consideraba necesario para elevar al máximo exponente la dignidad de los hombres y mujeres de este Planeta, llamado Tierra.

A José Antonio Labordeta un hombre sencillamente bueno le dedico este soneto al que un admirador suyo me ha permitido publicar.

A LA MIERDA

Al brasseniano Labordeta que ama
La vida y desespera a la muerte
Por su desafío y afilada suerte
Contra la canalla facha que mama

Del sencillo Ser que no tiene fama,
Pero que gusta de oír, sentir y verte
Cantar a la Libertad, contra el fuerte.
Al poeta que sustenta la rama

Mientras nos enseña que la dignidad
Ha de ser amada y defendida,
Sustentada y llevada a la eternidad

Planetaria por bandera querida.
Quedará latente tu espontaneidad
Por el honor de la ida referida.

U.G

domingo, 5 de septiembre de 2010

LOS INCUMPLIMIENTOS DEL ALCALDE

No puedo por menos que sorprenderme cuando leo en la prensa lo que a todas luces es un despropósito, maquinalmente preparado, para la contienda electoral que se nos avecina. Me refiero a la referencia crítica que hace el Sr. Alcalde de esta ciudad, a la Junta de Andalucía, por el caso (llamémosle así) Guadalmedina, que no es más que el mismo caso del famoso bulevar que nos oculta esa terrible yaga que conforma el ferrocarril en su entrada a Málaga o los problemas planteados por la peatonalización de carretera de Cádiz o la aprobación del P.G.O.U. etc. En definitiva, lo de siempre, la utilización desleal de una noble Institución, como es el Excmo. Ayuntamiento de Málaga, contra otra, por el simple hecho de que los que la dirigen son de un signo político distinto al del Sr. De La Torre. Es éste el único Proyecto Político que tiene el PP, con el mencionado regidor, a la cabeza, para Málaga, destruir al considerado “adversario”, sin pensar que las instituciones están al servicio de los ciudadanos y no de sus respectivos partidos y que éstas han de colaborar conjunta y recíprocamente en todo aquello que reporte bienestar a los habitantes a los que dicen representar.

Los árabes cuando le pusieron, por nombre, Guadalmedina a nuestro río, sabían lo que se hacían, por eso su nombre significa “río de la ciudad”. Supieron darse cuenta al instante de que el mismo iba intrínsecamente unido a Málaga, por eso cualquier actuación que se plantee sobre él ha de estar muy bien pensado y sobre todo, con los estudios técnicos precisos que nos indiquen claramente qué Proyecto es el que se adecua a su peculiar orografía.

Los malagueños conocen muy bien de lo que es capaz el Guadalmedina cuando se les ¡hincha las narices! (frase muy en boca de los que aquí vivimos) y saben que hay que tomárselo en serio, pues la experiencia que nuestra ciudad tiene al respecto no es nada buena, de ahí que sonroja cuando el Sr. De la Torre, casualmente siempre que hay elecciones o necesita camuflar sus faltas de ideas para con Málaga, se le ocurra sacar del cajón desastre que tiene en su mesa, la primera genial ocurrencia que le aparece para confrontar contra otra administración pública. La confrontación cateta, es su único proyecto de ciudad. Enfrentar a los malagueños con el resto del mundo, da igual la motivación y si le conviene a los malagueños o no. Eso y 300.000 m2 de terrenos que supondría embovedar el río y que les vendría muy bien para la especulación de los mismos.

En 2004 se descartó, por inviable, la construcción de túneles que desviaran sus agua y desde el 2007 nos encontramos inmersos en una serie de estudios que están realizando y realizan los que para ellos están facultados, con el claro objetivo de encontrar las obras hidráulicas y de otro tipo, idóneas para evitar de nuevo un desastre en nuestra Ciudad. Por tanto dejemos trabajar y pensar a los técnicos para que hagan su trabajo en condiciones.

El famoso bulevar que iría sobre el soterramiento de las vías del ferrocarril, en su entrada a Málaga, es otro instrumento más que el Sr. Alcalde quiere utilizar para la pelea política entre administraciones. Todo lo que pasa por sus manos se convierte en motivo de bronca y lo hace, como en todo lo demás, tras incumplir los acuerdos a los que previamente se ha comprometido en documento público. Su deslealtad llega a tal grado de sinrazón que no le importa mentir con tal de vivir unos años de enfrentamiento mediático con la Junta de Andalucía o con el Gobierno Central. Así lo hemos vivido con el metro de Málaga, que una vez llegado a acuerdos se le ocurría una nueva exigencia que imposibilitaba seguir avanzando con el Proyecto. Y este es el caso de la peatonalización de la carretera de Cádiz, cuyo ofrecimiento por parte del Gobierno Andaluz, para acometer las obras, sin que ello les costara un duro a los malagueños, no le ha hecho cesar en su empeño de poner múltiples impedimentos provocando retrasos a las necesarias obras. Tal es el despropósito que al día de hoy no se ha podido acometer los trabajos requeridos para el embellecimiento de la mencionada calle. Hay que decir que todavía no se descarta que al Sr. Alcalde no se le ocurra un nuevo planteamiento para impedir que comiencen los trabajos.

El P.G.O.U. es otro cantar, no aprobado al día de hoy por el incumplimiento fragrante de las normas urbanísticas establecidas, por parte del Gobierno Popular, en el Ayuntamiento y que ha supuesto el que tengan que elaborar uno nuevo que se encuentra en fase de estudio y aprobación, por parte de la Junta de Andalucía y cuyo plazo acordado, está para finales de año, por lo que comienza a ser lamentable la exigencia de que el mismo esté ya en Málaga, pues el PP, conoce muy bien cuales son los plazos para la verificación de tan importante documento.

Málaga, no se merece un regidor como D. Francisco De La Torre, carente de ideas, de ilusión y de fuerzas para levantar nuestra Ciudad y ponerla en el lugar que le corresponde. Málaga ha perdido peso político en el contexto andaluz, español y mundial y aparece, en los circuitos internacionales, como paralizada, a la espera de que se le produzcan los cambios necesarios para ser apreciada como una de las grandes ciudades europeas.

viernes, 20 de agosto de 2010

LA SINRAZÓN DE LA RAZÓN

Y dale con la matraca del Señor oportunista que viéndose partir hacia lugares más adecuados, se convierte en un pertinaz pelmazo de la vida política de todo un País. Siempre se ha dicho que en todos los pueblos hay un iluminado. Los hay que lo son por razones biológicas y no tienen remedio más que el de darles mucho cariño y ternura y los hay (estos son los peores) que se nos presentan imbuidos de un don divino difícil de precisar. Qué le vamos a hacer, son así, es su razón, esa que sólo unos pocos ven y nadie siente, pero que de persistir, la mayoría lamenta.

En el caso que nos ocupa, nos vemos todos los días, abocados a tener que soportar si no el exabrupto de uno de esos interlocutores válidos, es, eso mismo y su ingrata presencia en todos los medios de comunicación (sobre todo los afines) para hacernos comprender que nuestro País, es una ruina. Y es importante subrayar la razón de la sin razón, porque todo vale con tal de demostrar el hecho cierto y oportuno de que existe una conspiración socialista para someternos a las hordas enemigas del cristianismo español. ¡Sólo Dios sabe lo que pasa por la mente de estas gentes! Que diría un auténtico prelado de la devoción y culto al conservadorismo ¡Español!. ¡Dios nos libre de esta gente, me estoy refiriendo ahora, a la Derecha, claro!

¡España se nos hunde, eso ya no le cabe la menor duda a nadie, estamos rodeados de enemigos, que sólo persiguen la desestabilización de un sistema de valores, en el que el honor es su principal soporte!

Quiénes esto defienden, desde luego anclados en una concepción primitiva y propia de los poderosos de la Edad Media, son los que aspiran a Gobernar, algún día, España. La base sobre la que sustentan su propuesta es la de la confrontación radical contra toda sospecha de acabar con España, claro que los únicos que tienen sospechas son ellos, los únicos que ven enemigos, son ellos, y los únicos que quieren a este País, son ellos. Y en ese discurrir tan peculiar de estos Peperos de toda la vida, no se paran a pensar que en un Estado de Derecho, el diálogo, la tolerancia, la diplomacia entre vecinos, la coherencia respecto a nuestro posicionamiento en el contexto mundial, ha de estar, siempre presente en todas nuestras actuaciones; también y sobre todo, cuando somos oposición a un gobierno democrático.

Los Partidos que conforman nuestro sistema democrático tienen una responsabilidad de Estado incuestionable, son Estado y se deben a él y por nada del mundo han de ir contra él………pues de ser así, eso se llamaría traición o como creo que es el caso incompetencia respecto al conocimiento del papel que ocupa dentro de su País.

Es del todo intolerable que un ex Presidente del Gobierno, en la frontera de un país amigo o fuera de las mismas, igualmente países cooperantes, haga manifestaciones contrarias a su gobierno, en materia de política internacional (ya es malo que lo haga en lo que a la nacional se refiere) porque eso es ir contra el Estado que dice defender. Es un comportamiento que de tan conservador que es, se sale peligrosamente, de la línea que nos separa del rencor y el odio que se ponen de manifiesto en las dictaduras existentes en el mundo.

Paz en el cielo a los que en ellos tienen instalados su corazón y coherencia en las tierras de España, para así, seguir cosechando el reconocimiento internacional que tanto países como ciudadanos del mundo nos otorgan a los que en este modesto rincón del Planeta vivimos.

Compórtense, señores, compórtense.

Mari Carmen Sánchez, melillense de nacimiento.

miércoles, 18 de agosto de 2010

LA FERIA QUE PODRÍA SER

El Ser auténtico de la Feria, desde luego, no es el que tenemos en esta Málaga nuestra, a fecha del Solsticio de Verano, del año 2010.


La dejación perpetrada por el Gobierno Municipal, una vez más, contra lo que a todas luces tendría que haber sido una manifestación de nuestro arte y de nuestra cultura se nos presenta como un gran macro botellón, auspiciado y permitido por aquellos que dicen querer desterrarlo de la faz de la tierra, claro que esta vez no son los jóvenes los encargados del montaje y organización institucional.

Se hecha de menos aquellos tiempos en que Málaga se diferenciaba del resto del mundo por lo singular de su Feria, por un lado su Centro Histórico se engalanaba recuperando el colorido de sus jazmines, gitanillas y geranios invitando al folklore más típico y ambientalista que tenemos. Comerciantes, ciudadanos, entidades asociativas y su Ayuntamiento se ponían a la cabeza de su preparación, implicando a todo el mundo en el éxito (incuestionable) de una Feria del Centro y de un Real que era la envidia de propios y extraños.

La vestimenta de los malagueños con sus trajes típicos de gitanas, en sus mujeres y de corto, en sus hombres, contribuían juntos con las malagueñas, los verdiales y las sevillanas y mucho de flamenquería a embellecer nuestra ciudad, creando un ambiente de convivencia y de relación social maravilloso y desde luego, propio de un momento de fiesta como el que nos gusta vivir a los malagueños.

Lo que vivimos ahora, tiene el sello de un regidor triste y ciertamente gris, dónde la música, no nuestra, del tachín, tachín, y los descamisados proliferan por doquier, con litrona en mano y exabruptos de alta voz, que provocan un sentimiento de ridículo a los que nos gusta el divertimento simpático, educado y elegante.

La Feria de Málaga necesita a los malagueños y malagueñas y los necesita para darle un impulso internacional que la proyecte como el evento cultural y artístico más importante del Sur de Europa, un espacio abierto a todos los ciudadanos del Planeta, dónde a través de nuestras cosas, se sientan tan integrados que, igualmente, les haga participar en su engrandecimiento.

La Feria del Centro ha de ser eso, la de todo el casco histórico de Málaga, no sólo de dos calles, sino toda ella al completo, con la implicación de sus vecinos, de los comerciantes, dónde desde cada pequeño negocio (como se hacía antes) le ofrezca un aperitivo al visitante, dónde la música popular prolifere junto con nuestra alegría. Un Centro histórico al que los malagueños exijamos que todos presentemos la mejor cara que tenemos, la mejor imagen del andaluz, desterrando la chabacanería de aquellos que no entienden que esta fiesta se puede ver correspondida por millones de turista de todo el mundo y que a ellos hay que enseñarles que tras los festejos se encuentra una ciudad con hermosos rincones y con un patrimonio histórico digno y dispuesto para ser admirado.

El Real de la Feria, ciertamente, ha de estar enfocado de otra manera, ha de ser un indicativo del modo de vida que nos plantea nuestro clima. Ha de estar presente, en todos los que a ella asistan, que tras el cachondeo, está el arte de los que amamos la vida y que ésta se manifiesta con actividades de todo tipo, en un entorno, que ha de no desmerecer en nada a ese bello edificio que tiene al lado, cual es, el Palacio de Ferias y Congresos. Estos dos juntos han de congregar a lo largo de todo el año, a miles de personas interesadas en el fomento de los nobles modos de convivencia cultural y artística.

Es por tanto pertinente el debate abierto por María Gámez sobre el Ser de la Feria de Málaga. Ustedes, amigos y amigas, lectores y lectoras tienen la palabra y la acción para cambiarla.

Mari Carmen Sánchez Aranda

viernes, 6 de agosto de 2010

OBNUBILADO ALUCINE

Siempre atisbo el horizonte con cierta zozobra al contemplar que los altares de los Dioses han de tener unos resortes que impiden ver lo que por encima y por debajo de esa fina línea hay. Es probable que una no sepa mirar bien o que no sepa analizar con eficiencia lo que se aprecia.......de bueno, entiendo yo, si mirara con los ojos de un auténtico analista, ya sea hombre o mujer (que algunos se empeñan en afirmar que no tenemos la misma mirada).

La desazón me viene provocada al hacerme la pregunta afirmada de: se pueden perder los sentidos al llegar al lugar magnánimo de los que están más cerca del cielo, es más, sin llegar, tan sólo acercándose...........bueno, sin acercarse, intuyendo que se pueden acercar y conformar un comportamiento ausente y displicente para el común de los mortales. ¿Qué pasa por la mente de un mortal? Que dice ser lo contrario de lo que muestra ser.

El omnímodo proceso de acercamiento al bien, que todos y todas experimentamos nos lleva a veces a interpretar las cosas en función de múltiples factores que a menudo son ajenos al camino originario que se ha emprendido para llegar a él, bien porque falta base, bien porque no hay trayectoria a seguir, bien porque no hay un proyecto que le conduzca a la nobleza del aura bienhechor o bien porque no hay nada, de nada, de nada. De ahí que muchas personas escojan a destiempo un camino que no conduce más que a momentos efímeros de beatificación de su comportamiento, es lo que llamamos: su momento de gloria.

Siendo honesta he de reconocer que todo el mundo tiene, porque lo busca o porque lo necesita, en el espacio tiempo de su vida, su chispa de esplendor; pero lo malo no es tenerlo, es instalarte en un constante y obnubilado alucine.

Las responsabilidades que una asume, siempre voluntariamente, para desde la política, poder mejorar la vida de las gentes, ha de estar en sintonía con el sentir de las mismas, de forma y manera que los que nos dedicamos a esto de lo público, no seamos más que correas de transmisión del sentir ciudadano, huyendo, siempre que se pueda, de las cuestiones banales que en todas las tareas, voluntarias o no, se dan. Ejemplo de lo que digo es, si el principal problema que tienen los ciudadanos es la situación económica, el empleo, un Ayuntamiento como el nuestro no puede dejar abandonados a los polígonos industriales que tiene en su ciudad por una foto dando un martillazo a una campana o en bañador para demostrarnos sus cualidades físicas.

Los malagueños nos piden hechos, es decir, una apuesta decidida por nuestro tejido productivo, la ciudad limpia, el transporte que sea operativo, obedeciendo a las necesidades de aquellos que hacen uso de él y no a criterios de centralidad que restan eficiencia al servicio. Adecentamiento del Centro Histórico y dejarse de esa actitud banal de fotografiarse junto al Museo Picasso, utilizando su majestuosidad en beneficio propio y olvidándose que éste necesita de un entorno cuidado. Etc. Es decir ser coherente con lo que decimos ser.

La política siempre está cargada de la ideología del proponente. Por la historia de la humanidad y por experiencia familiar y personal sabemos que la Derecha obedece a valores individuales y egoístas, de ahí que reciban más, aquéllos que más tienen. En cambio la izquierda impregna de igualdad, justicia social, solidaridad, libertad todas sus iniciativas y lo hace desde la tolerancia, el diálogo, la cooperación, etc. De ahí que sea muy importante que no perdamos el rumbo de los acontecimientos históricos y seamos generosos e inteligentes en nuestros procederes, primando en ellos los mismos valores que aplicamos a nuestras políticas.

Málaga, necesita impulsar la generosidad de sus gentes y aplicar ésta a la ciudad en la que vivimos. Un Ayuntamiento, un regidor, que bucea en el submundo de la contemplación expositiva, no es más que el representante de una institución muerta y decadente. Los malagueños necesitan cambiar la brillantez de los iluminatis por la eficiencia de unas mujeres y hombres que sepan (porque conocen) cambiar las cosas para mejorar la vida de los que en ésta noble y bella ciudad viven.

jueves, 15 de julio de 2010

MÁLAGA SE MERECE LO MEJOR

Empiezo este artículo pidiendo disculpas por el retraso en escribirlo, ningún portal merece estar tanto tiempo sin ser ocupado, por lo que prometo solventar los problemas que tengo con el tiempo y reiniciar un fluido intercambio contigo, lector. Gracias.

Conviene que reflexionemos sobre el papel de los políticos en las sociedades democráticas europeas y sobre todo, el concepto que de nosotros tienen los ciudadanos, y si éste es el fruto lógico de nuestras actuaciones y comportamientos o simplemente equivocan los parámetros sobre los que obtienen la valoración.

Como siempre he pensado que nosotros, también, somos ciudadanos y observamos la realidad con los mismos ojos que cualquiera, permítaseme que por un momento me quite el vestido de política (si esto es posible) e intente dar mi particular visión política, analizando aquellos temas que importan y preocupan a los malagueños.

En primer lugar sería interesante contemplar que en esta confesión personal y sincera que hago tendría que poner de manifiesto que los malagueños, malagueñas, entre las que me encuentro (políticos y no políticos) en esto de la cosa nuestra, no somos lo que se dice muy apegados, lo digo en el convencimiento de que una gran ciudad como es la nuestra, llamada la capital económica de Andalucía, la tierra del Sol y de la afluencia de millones de ciudadanos de todo el mundo, que vienen a nuestra provincia con el ánimo de admirar e invertir en su belleza natural su pequeña o gran fortuna, no es de recibo que unos y otros (ciudadanos y políticos) tengamos nuestros pueblos (fundamentalmente los costeros) y su capital en un estado, que bien podríamos decir mejorables. La falta de preocupación por nuestra historia, la dejación en la defensa de un litoral y una Málaga bella y atractiva, la desmotivación de los malagueños para la movilización y/o generación de opinión contra aquellas cuestiones negativas para nuestra imagen y nuestro sentido estético y la siempre dificultad (esto último endémico de nuestro País) para el acuerdo entre las principales fuerzas políticas en aras de la principal razón que ha de moverles, cuales son los ciudadanos, hacen que nuestro aspecto no avance en concordancia con el lógico, para la que dice ser la quinta provincia de España. En lo relativo a Málaga capital toquemos tres temas que vienen a demostrar lo que digo más arriba: el puerto, el urbanismo, los espacios productivos.

Conviene precisar primero que los asentamientos fenicios (en Málaga, siglo X a.c.) tuvieron la gran virtud de realizarse a lo largo y ancho del Mediterráneo siempre mirando al mar, logrando una simbiosis entre la civis y su puerto. Nada se construyó por casualidad y todo era realizado con la vista puesta en un horizonte de luz que les proporcionaba a los habitantes de sus ciudades el atractivo suficiente para que los foráneos que por allí pasaban quisieran venir a comerciar o a visitar tan hermosos enclaves. La economía de estas tierras dependía, por tanto, de una imagen de modernidad, de cercanía por el carácter afable de sus gentes y de servicio, pues siempre se entendió que éste debería ser uno de los objetivos claves entre Málaga y el resto de asentamientos, entre ambas orillas. Esta relación entre la ciudad y su mar proporcionó una visión diferente respecto a las ciudades del interior, debido fundamentalmente al intercambio cultural que se daba con multitud de ciudadanos del mundo, lo que nos proporcionó valores como son los de la tolerancia, la aceptación del diferente, el diálogo permanente, la discusión responsable, etc. Es decir conseguimos ser un pueblo que prefería la relación social pacífica a la violencia.

Hace ya, más de veinte años, desde que, no sin poco esfuerzo, se logra un gran acuerdo (Plan Especial del Puerto, año 1998) sobre la base de un sentimiento popular como era la apertura de nuestra ciudad al Mar, rompiendo, acabando en un futuro próximo, con la anacrónica muralla que la dividía. El famoso Plan ha sufrido, a lo largo de todos estos años, diversos y complicados ataques especulativos, siempre bajo el mismo común denominador, hacer de oro cuanto espacio pudieran adquirir, especialmente la esquina que separa el muelle uno del dos. Pudiera ser entendible que las administraciones “responsables” no tuvieran el dinero suficiente para llevar a cabo un proyecto ambicioso, pero esto no es óbice para que cualquiera que se proyectara, para un enclave tan especial como el descrito, no tenga por qué no tener una carga importante de valores, en los que predominen el servicio a la ciudadanía de Málaga. Nadie, absolutamente nadie entiende qué pasa por la cabeza de nuestros administradores cuando su decisión es poner, por ejemplo, un supermercado, en un lugar emblemático como es el Puerto de Málaga.

Nuevamente han de ser ciudadanos, intelectuales, artistas, profesionales (Manifiesto de los cuarenta) los que tienen que dar un golpe de atención sobre tamaña barbaridad y manifestar claramente que Málaga no merece ser tratada así. Los malagueños aspiran a tener y exponer la mejor imagen de nuestra ciudad y ello comporta que su uso no se vea corrompido por el acotamiento cultural, educativo y artístico de nuestra tierra. El foráneo que venga en un crucero tiene que hacerse una idea noble de nosotros nada más acercarse a su bahía y desde tierra ha de sentir la suave brisa con olor a mediterráneo. Por ello me adhiero al manifiesto de los cuarenta y les aliento a seguir adelante en su actitud, que les honra y de alguna manera es un principio que puede ir rompiendo con ese tópico de que los malagueños no defendemos lo nuestro.

El urbanismo de nuestra ciudad ya comenzó en los años setenta siendo caótico y descorazonador para los que siempre hemos creído que una planificación urbana es posible y necesaria para cualquier urbe que se precie de serlo y ha de serlo en tiempo y formas. Son muchos los ciudadanos y profesionales conocedores de la planificación urbanística que no entienden cómo desde el primer PGOU de 1983 se han repetido nuevos planes en 1997 y ahora en 2010, no sin pocas vicisitudes. En veintisiete años tres planes generales, cuando estos si se realizan con los consensos oportunos, con la participación adecuada y con la responsabilidad política de quienes tienen una Razón de Estado, tan importante como es la de dirigir el futuro de una ciudad como es Málaga, deberían haber realizado tan sólo uno en el periodo de tiempo mencionado. Un PGOU por cambio de partido político y otro por la incompetencia del último administrador, del mismo signo político. En el fondo está la ambición económica de quienes no tienen bastante con lo adquirido en el primer Plan y en la forma está la inequívoca respuesta del que no quiere diálogo, debates y acuerdos con las personas que les ocupan y les preocupan Málaga.

Si desde luego inapropiados son el tratamiento dado a nuestro Puerto y al urbanismo malagueño en general, no menos infame es el dado a nuestros Polígonos Industriales.

Según la Confederación de Empresarios de Málaga, los polígonos industriales en esta ciudad, pueden generar un empleo neto de alrededor de treinta mil personas y si bien las administraciones cada vez tienen más conciencia de la necesidad de adecentar los espacios productivos y adecuarlos a través de su modernización no es menos cierto que todavía queda mucho por hacer para convertirlos en verdaderos parques empresariales.

No me estoy refiriendo a la tan necesaria transformación que las pequeñas y medianas empresas han de hacer con sus negocios, acercándose cada vez más a las nuevas tecnologías y a las fórmulas de intercambio comercial, nacional e internacional, propios de las modernas y competitivas empresas que trabajan bajo la dirección de las, igualmente modernas técnicas de comunicación, información y marketing. Me refiero a que la competencia viene dada también por la ubicación de las mismas en un entorno amplio, limpio, con capacidad de maniobrabilidad de vehículos pesados, con aparcamientos y con un aspecto lejos del gueto (a decir por los propios empresarios) al que en nuestra Málaga aparentan dar.

Se hace necesario entender que además de representar un porcentaje importantísimo del empleo y de la riqueza de esta ciudad, es, al formar parte de ella (nunca podemos olvidarlo) fachada y escaparate de lo que somos y aspiramos a ser los malagueños. No podemos entrar a un polígono y encontrarnos con el colapso de vehículos, con la suciedad y con el caos circulatorio en todas y cada una de sus calles. Los polígonos industriales de Málaga necesitan de una firme y decidida apuesta o de un gran movimiento ciudadano y de trabajadores que reivindique su derecho a producir decentemente.

Pongámonos manos a ello y dejemos de mirarnos el ombligo. Málaga se merece lo mejor.

sábado, 26 de junio de 2010

¡VIVA LA ROJA Y LOS ROJOS!

Está bien que un País se movilice en pro de un objetivo común, yo diría más que bien, necesario y sobre todo dice mucho de un pueblo cuyo alto nivel educativo le induce y motiva a reaccionar ante la adversidad y elevar la voz enunciando el basta ya del pesimismo y del inconformismo y reclamando y exigiendo que con su contribución, su esfuerzo, su incansable impulso……….. la victoria esté asegurada.

No puede haber nada más admirable que todo un País, unido por un símbolo, antaño repudiado por un significado perverso de terror………se eche a la calle a gritar declamando la atención de ricos y pobres, de gobiernos y oposiciones, de países amigos y enemigos……..de todo el Planeta, en pro de un noble y necesario deseo cual es, obtener la satisfacción del ego perdido. ¡Que noble acción!

Eran las siete de la tarde y todo el territorio nacional iba in crescendo en ánimo, en tensión, las calles bullían de expectantes padres de familias con sus hijos pululando de un lugar a otro, todos nerviosos, anhelante, expectante ante el pronto acontecimiento que marcaría sus vidas probablemente para siempre. El colapso llegaba a las autovías, las carreteras locales se llenaban de banderas y de gritos espontáneos como si de expresiones reivindicativas se tratara, todo el mundo se volvía, se giraba en busca del detonante momento vindicativo para sumarse con voz potente ¡Viva………….! Lo que sea, pero viva.

Sentimientos de emoción se mezclan con el dolor y el sufrimiento por la incertidumbre que provoca esa espera desesperada de horas, minutos y segundos hasta el momento crucial de la salvación nacional.

Todos unidos, no por cuestiones de Derecho, no por un empleo digno, ni siquiera porque el digno sea el salario o no perder el mismo. Nada de cuestiones banales. Todos abrazados al modo sincero de explosión de alegría, todo un placer que nos hace aparcar las diferencias y tanto peperos como socialistas, en gestos que honran las capacidades de unos y otros para coincidir, al menos por unas horas, entorno a un mismo proyecto que se llama ¡Ganar el mundial de futbol! La emoción del momento todo lo puede. ¡Podemos!

La política tiene esta maravillosa contradicción, a veces las cuestiones de Estado están en aquellas cosas que a todos juntan y a todos desunen, esto dependerá del momento político que se de, es decir, si ganamos, los nuestros lo han hecho, si perdemos la culpa es del Gobierno.


Termino enviando un deseo, que ganemos, que triunfemos en todo aquello de darle a la bola y en lo demás también, pues España son los españoles y sin ellos o con ellos en condiciones de precariedad, España no es nada.

¡Viva la roja y los Rojos!

lunes, 21 de junio de 2010

TINTES TOTALITARIOS

He aquí que, como en un cuento de hadas, nos encontramos sumidos en uno de esos momentos políticos en el que la falta de respeto del principal partido de la oposición, a los demócratas, en España, pasa por la imposición de sus ocurrencias, al peor de los estilos llevados a cabo en cualquiera de las desgraciadas dictaduras habidas en nuestro Planeta.

La carencia de principios y valores democráticos no sólo les lleva a postularse, un día, como Marxistas Leninistas, convirtiéndose en partido de trabajadores y otros en los mayores defensores de las posiciones más Chaviztas o Berlusconiana, asumiendo posiciones que sólo elementos de esa clase son capaces de asumir. Todo vale con tal de llegar al Poder. Y es que los lectores de este blog, estarán conmigo en que son los políticos más malos, perezosos y malcarados que existen en Europa. Desgraciadamente todavía tienen muy cerca las enseñanzas de sus progenitores.

Pues bien en este contexto he aquí que me encuentro que su descaro llega a cotas inimaginable, sólo superadas con una nueva barbaridad como es el hecho ocurrido en una pequeña feria de barrio, como es la del Puerto de la Torre, dónde los partidos políticos de izquierdas, tras más de veinticinco años de participación en la misma y de haber contribuido en gran medida a su creación y potenciación, se les quiere obligar a presentar por escrito una memoria de las actividades políticas que estos realizan en el Distrito dónde tienen fijadas sus agrupaciones. Quieren fiscalizar a la izquierda como si de su chiringuito autoritario se tratara, para que nada se moviera sin su consentimiento. Probablemente lo que les gustaría es convertirnos en sus clientes de distritos, controlados a modo de graciosas prebendas, eso sí, claro, subvencionadas con el dinero de todos.

Al igual que Esperanza Aguirre, desafía e ignora los preceptos de las Leyes y es capaz de lanzar un Órdago al Gobierno de España y a la Constitución española incitando a los españoles a no pagar el IVA, los concejales del PP malagueño, con su alcalde D. Francisco De la Torre a la cabeza, pretenden vulnerar la Ley de Partidos Políticos e igualmente la Carta magna.

Estos tintes totalitarios son cada vez más frecuentes y más peligrosos, valdría pues plantearnos a qué no estarían dispuestos los hombres y mujeres de la Derecha, en Málaga y en España a llevar a cabo, si tuvieran la posibilidad de gobernar Andalucía y España, al mismo tiempo.

Es verdad que su extremismo raya la vulgaridad pero su esperpéntico comportamiento no nos debe hacer llegar al conformismo simpático, pues sus maneras pintan formas peligrosas para el modelo de Libertad que nos hemos dado en participar en Europa.

Los españoles hemos tomado una decisión y es la de participar en el modelo de participación ciudadana más humano y solidario que existe en el mundo, cual es el europeo y a su vez los partidos de izquierdas nos hemos comprometido, como defensores de los intereses de la inmensa mayoría de la población, a humanizar una sociedad creada y nacida para unos pocos, precisamente esos a los que defienden el PP.

La igualdad y la justicia social, junto con la solidaridad y la Libertad han de confrontar con aquellos que nos quieren imponer su voluntad, vulnerando los preceptos constitucionales que todos los españoles nos hemos dado y para ello se hace necesario redoblar los esfuerzos en la defensa activa de la política. Por tanto es imprescindible la movilización ciudadana, la dinamización social, la politización de todos los estamentos sociales, de forma y manera que nos convirtamos todos, en activos precursores de los cambios políticos, sociales y económicos, de nuestro País.

jueves, 17 de junio de 2010

El Verdial un valor humanista



Los Verdiales, fiesta, arte milenario, conservado en su estado más puro gracias a la protección que le dispensaron, durante siglos, nuestra peculiar orografía malagueña y sobre todo las gentes que habitaban sus montes.

Esta Fiesta, como la llaman los entendidos en la materia, forma parte de nuestra cultura y patrimonio malagueño, motivo por el cual, todos y cada uno de los que habitamos esta noble ciudad, tenemos un compromiso para con ella, especialmente sus Instituciones y muy particularmente, el Excmo. Ayuntamiento de Málaga.

La gran apertura que supuso el que todo nuestro entorno geográfico se abriera a la ciudad y al mundo, gracias a las infraestructuras de carreteras y transportes fundamentalmente, han hecho que podamos conocer, con más precisión, los cantes y bailes verdialeros y podamos admirar su música y peculiaridad artística, tan puramente conservada. Pero, del mismo modo, se ve amenazada por la incomprensión, las influencias negativas que supone el abandono del entorno que le vio nacer, la falta de escuelas y de promoción del arte del verdial.

El Gobierno conservador de Málaga, no cree en los verdiales, tan es así que una de las primeras medidas que tomaron cuando asumieron el Poder, fue la de acabar con una fiesta multitudinaria que se celebraba todos los años en el Puerto de la Torre, en los albores de su Feria. Esta manifestación cultural llegó a congregar a más de tres mil personas, cada año. Acabaron con ella, creando nuevas asociaciones, rodeándose de personas que no sabían de esto y convocando, a su vez, nuevos actos (no lo podemos llamar Fiestas) con la displicencia de las gentes que han nacido, que entienden, creen, les gusta y se dedican a su fomento. A toda esta sarta de incomprensiones hay que poner sobre la mesa que la ignorancia del P.P. en el Exmo. Ayuntamiento de Málaga, les lleva al desarraigo permanente de la Fiesta, es decir, ésta no es nada fuera de los montes y campos en el que nació y se preservó, de ahí que la permanente manía de llevársela a la Feria de Málaga o a cualquier otro lugar de la urbe malagueña, no hace más que contribuir a su descomposición.

Recientemente hubo una reunión de la Asociación Verdialera “Amigos de la Torre” con Alcaldes de Pandas y fiesteros en la que se puso de manifiesto la preocupación de sus hombres y mujeres por el deterioro que va sufriendo su arte y dejaron claro la reivindicación, ya antigua, de: más y mejor formación de los nuevos valores, un definitivo y estable lugar dónde celebrar la Fiesta Mayor de Verdiales, que por cierto, todos situaban en la zona del Puerto de la Torre -los Verdiales y dónde se podrían celebrar más eventos fiesteros, como la Rifa, acontecimiento histórico del verdial, que ya prácticamente se ha perdido, por la desidia de la administración municipal. Quedó patente el descontento por los comportamientos conniventes, de los montajes asociativos, que se autoerigen la representación de las Pandas de Verdiales, con una administración, que no gustan de los verdiales y que sobre todo no reconoce su historia.

Cuando un malagueño defiende el Verdial, no sólo está defendiendo unos cantes y unos bailes. Es importante entender que tras ellos hay, a decir de los estudiosos, un modus vivendi que nos retrotrae a más de mil años. Los verdiales, junto con la churripampa y los cantes de la trilla, representaban la puesta en escena, la demanda, la declaración amorosa, la exposición de unos usos y costumbres que caracterizaron durante siglos, a los malagueños de nuestros montes. Hay puesto en este arte, mucho de sentimientos, de anhelos, de alegrías y penas. En los verdiales sentimos cómo y cuanto se trabajaba, cómo las mujeres andaban de colina en colina hasta llegar al río, arroyuelo o pozo más cercano a lavar la ropa, para volver sobre sus pasos al hogar, cómo los hombres y los niños trabajaban la tierra de Sol a Sol o cuidaban el ganado. Todo un mundo de sabores, olores y colores que no pueden dejarse al albur del desarrollismo que todo lo olvida.

Potenciar nuestra cultura es una responsabilidad de todos y todas, por ello, los políticos, muy en especial los que gobiernan, tenemos, tienen, la obligación de trabajar incansablemente, teniendo en cuenta siempre, que a más cultura más educación en valores y que ello redundará en el bienestar de una sociedad, muy necesitada, de comportamientos solidarios, justos y fraternalmente humanos.

sábado, 12 de junio de 2010

OTRA VISIÓN DE MÁLAGA

Que Málaga es una gran ciudad no lo duda nadie y que lo es, fundamentalmente, por la calidad humana de sus gentes, eso si que es indudable. El carácter del malagueño pasa por su tolerancia, por su capacidad de aceptación del diferente, por su nobleza y por su actitud positiva ante la vida.

Ahora bien, habrá que convenir que esta ciudad a la que amamos profundamente no se ve correspondida, desde hace ya más de una década por su máximo responsable municipal. Se encuentra abandonada al albur del capricho de los que la ven nada más en términos de mercadeo. Manoseada por la incompetencia de quien no tiene un Proyecto humano de ciudad sino una intención clara de someterla a la duda y a la incertidumbre del que no saber que hacer con ella.

Nuestros ojos ven a menudo una realidad, un centro histórico degradado por mor de un abandono intencionado, de alguien al que parece esperar que la divina providencia ilumine su entendimiento y como si del maná se tratara se levantara todo un urbanismo caótico. Pero ello y sin que sirva de consuelo, no es más que el fiel reflejo de una ciudad en la que nada marcha pues nada está pensado en clave ciudadana.

A todos nos gustaría poder reconocer que esa maravillosa calle Larios ha sido el colofón de una serie de actuaciones inteligentes en la que volviera a hacer florecer todo ese gran escaparate que los turistas presencian cuando entran por el puerto marítimo, cual es, la fenicia Malaca. Pero no, el que se atreve, se interna por una calle Nueva, cuyos alrededores está decayéndose de puro abandono. Carretería, antaño centro neurálgico del comercio tradicional malagueño, lugar de una vida activa potentísima y de una belleza sin igual, representa la peor cara del peor interior que le contonea. Alrededores del Teatro Cervantes, Plaza de la Merced, Alcazabilla, Granada……ya saben el dicho popular, presenta un aspecto de ciudad sitiada y bombardeada. El resto de la ciudad no presenta mejor aspecto, salve decir, tan sólo, que no está, precisamente diseñada, para nuestros hijos, ni mucho menos para mayores, ni casi para vivir.

Necesitamos del ingenio, la creatividad y la alegría del malagueño, malagueña para imprimir las energías suficientes que provoquen el entusiasmo institucional para emprender los cambios que necesita esta ciudad. Tenemos que erradicar definitivamente la tristeza y el cainismo municipal que tanto daño le está provocando a Málaga, a su economía, a su imagen, a su vida social…..

La política que necesita Málaga pasa por personas que humanamente se sientan malagueñas y sobre todo quieran que su tierra sea admirada, no sólo por su Sol y sus playas. No necesitamos de comportamientos hipócritas para ser grandes, sino de la nobleza que nos es innata y nos ha venido dada a lo largo de la historia de este pueblo nuestro.

Los ciudadanos del mundo han de vernos como somos y han de ver nuestra tierra, como nos gusta a nosotros que se vea, como nos gustaría verla a todos y a todas, una urbe con tradición pero adaptada al siglo XXI, un comercio, el suyo de toda la vida, joven, influyente, dinámico, atractivo, potente y extendido por todo su perímetro, convirtiendo la ciudad en un atrayente lugar de encuentro. Necesitamos una gran zona verde y/o de ocio, cerca del mar, de nuestro mar, de ese que nos ha proporcionado la sal de nuestras lágrimas y de nuestros sentidos, un gran parque que nos haga recordar el que ya construyó el arquitecto Rucoba y Crooke, en cumplimiento de esa Ley de 1896, que ya inspirara Cánovas; enamorándonos, igualmente, por haber sido ampliamente superado.

Esa política ha de abrirnos las puertas al mar, eliminando barreras anacrónicas y sin sentidos en un mundo de Libertad al que pertenecemos. Ha de construirse un trazado ejemplar para la nueva ciudad que nos circunda y ha de hacerla accesible y habitable para todos y todas los que quieran en ella criar a sus hijos. Tiene que estar bien comunicada, pues ya hemos descubierto que es a través de un pronto desplazamiento como damos vida a la ciudad, a los municipios entre sí y cómo los comunicamos con el mundo, haciéndolos ricos y productivos.

En definitiva, una ciudad se levanta con la anuencia de los que viven o pretenden vivir en ella y no a su espalda. El gran núcleo urbano tiene que serlo no por su dimensión, sino por su capacidad de interrelación de los que en ella viven. El urbanismo desarrollado es aquél que contempla la convivencia solidaria y en paz de sus habitantes, es esa que permite la relación social fluida y responsable, desde la tolerancia y la empatía por valores de paz y solidaridad y sobre todo es ese que permite, de forma natural, el diálogo entre las gentes y entre éstas y las instituciones.

Estoy convencida que los políticos tenemos que oír más y conversar más con la ciudadanía. Ella tienen la solución.

lunes, 31 de mayo de 2010

UN FRATERNAL SALUDO

Estimados/as amigos/as:

Nos encontramos plenamente inmersos en lo que llamamos la Revolución de las Nuevas Tecnologías, lo que nos lleva, a pesar, muchas veces de nuestra incredulidad resistente, a exponer nuestras vanidades, en plataformas tan importantes como ésta.

Como creo que es muy difícil abstraerse de ella, quiero de todas formas agradecerte tu presencia en este, tu blog, que no tiene más pretención que la de hacerte partícipe de mis ideas, inquietudes y por qué no, de las iniciativas que como persona política, que soy, tengo para el común de los ciudadanos/as.

Este portal no será nada sin ti, sin tu aportación ya que me gustaría se convirtiera en, la modesta voz de la gente. En un lugar de encuentro en el que establecer amistades, complicidades y por supuesto, un intercambio de reflexiones y consideraciones sobre la realidad de la vida.

Con este medio espero que las aportaciones que entre todos y todas hagamos contribuyan a mejorar las relaciones entre personas y la calidad de vida de la ciudadanía.

Muchas Gracias.

Mari Carmen Sánchez